19 de agosto de 2010

Una nueva estrella del Rock


Parece que fue ayer cuando soñaba con ser astronauta. Entonces no faltaba de nada: casa, perro, educación.... dinero. A medida que pasa el tiempo la Luna queda más lejos para mi. Es lo que tiene ser negado en ambicionar, nunca aprendí a querer hacer realidad mis sueños.

Por suerte no soñé demasiado tiempo con esa idea; pero sí con otras, y siempre terminan dándome la espalda. Es por eso que cada vez más dejo pasar la oportunidad de volver a tener 5 años menos. Como niño tímido y cabezón mi vida era sencilla, nunca dormía donde de una vez quería salir. Hoy en día duermo en cualquier rincón. Y con ésto no quiero decir que dormir esté mal, pero sí lo está cuando ya no puedes soñar. Creo que si alguien pierde esa capacidad.... bueno, por muchas margaritas que deshojes no te tocará la loteria.

Como un idiota pienso en la suerte. Si de verdad existe, ¿por qué no puedo ser yo su amante?. Mirarla y besarla, realmente creo que no se sorprenderá.


(Black Magic Woman)

15 de junio de 2010

(Untitled II)

Solía tener esa clase de locura que a todo el mundo le gusta. Mataba gatos, sí, pero eso nunca le impidió sonreir cada noche antes de dormir. Porque cada cual preguntaba una cosa, alimentando su indiferencia, pero nadie se atrevía a negar nada de lo que dijese. Era una condición universal.

Que cosa más rara, ¿no?.

Y un día ella llegó, a sus 60 y pico, vieja y arrugada, dolida y angustiada, sosteniendo en la mano derecha un hacha. Tenía esa mirada loca que la hacía tan especial. Murmuraba algo ininteligible y superficial, así durante horas, hasta gritar y desaparecer. Nadie tuvo miedo hasta entonces.

Y nadie lo volvió a tener jamás.

(Nada en especial)

Menta, mientes!!

(Redemption Song - B. Marley)
Menudo desastre de vida. Una vez la perdió y ya nunca volvió a ser suya. Desde entonces sólo deambula por su habitación, solo, siendo muestra de una incompetencia sin precedentes.

Desde entonces solo es una caricatura de lo que fué: incoherente, irracional... idiota. Busca cualquier excusa barata que le haga pensar... "Joder, no está tan mal".

Cualquier excusa con la idea de no decir adiós a su cama. Ya quemó un día su diario, ¿por qué no podría, quizás, volverlo a hacer?. En fin.

Fin a todo. Adiós.


(Menudo desastre de vida)

4 de junio de 2010

Crecer


Con lo fácil que sería ser un rey....

...pero NO!

(Iluso devoto)


Insana conciencia, ya podía haberme dejado ser un niño unos 20 años más...

28 de marzo de 2010

Dichoso momento


Lo primero es tener en cuenta que ésto no solucionará nada. Ni por asomo. Ya que siendo (¿por qué no?) sinceros este entuerto en general tiene difícil arreglo. Porque pasan los días y el ingenio se agota.

Lo triste es que tiene tánto de cierto como de penoso. Bien, me explico:


Por propia experiencia sé que la historia de un iluso suele escribirse en partes sucesivas. Una tras otra. Y cuando empiezas con ella no puedes parar. Te atrapa. Ves como la tinta narra lo que tú en realidad temes, porque lo que si es cierto es que un iluso suele defraudar a su público, ya sea objetivo o no (pero eso es irse del tema). La cuestión es que te enfrentas cara a cara con alguien así y la primera imagen que ronda tu cabeza es un ave cayendo. No sé si os habrá pasado pero yo cada vez que escribo un nuevo capítulo el ave roza más el suelo.


Y cierras los ojos y piensas... "¿alguna cara nueva?". Joder, hay millones de ellas. Pero tras esas millones un iluso solo ve dos, gracias (todo sea dicho) al espejo que tiene delante.

Incoherentemente cada cierto tiempo se reza a sí mismo por su salvación (como buen iluso), se lava la cara con jabón y a otra cosa. Pero cuando lo reflexionas desde fuera cada persona vive su propio mundo, y esa otra cosa no es más que una ilusión.


(Es como esculpir piedra con un pepino )